¿Qué impuestos pagan los beneficiarios de los seguros de vida?
¿Vas a cobrar un seguro de vida? Entonces debes saber que hay cumplir con Hacienda. Y dependiendo de las circunstancias en cada caso, la indemnización que has cobrado de la aseguradora puede ser objeto de diferentes impuestos. En este post te contamos qué impuestos pagan los beneficiarios de los seguros de vida en cada situación, para que tengas toda la información sobre el cobro del seguro.
Al cobrar el seguro de vida podemos tributar por dos impuestos, según el caso: el IRPF o del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Todo dependerá de si la persona beneficiaria de la póliza es la misma que la que firmó el seguro o no, y en qué circunstancias.
Si el beneficiario y quien lo contrata son la misma persona, se debe pagar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, el IRPF. Pero si quien cobra el dinero es una persona distinta de quien lo contrató, hay que tributar por el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Además, hay que tener en cuenta que el dinero que se tendrá que pagar será distinto según la persona que lo reciba y su parentesco con el fallecido (pareja, hijos, amigos).
Esto parece un poco complicado, pero te lo explicamos más detalladamente.
Impuesto de Sucesiones y Donaciones en los seguros de vida
Cuando el tomador del seguro no es la misma persona que el beneficiario, la tributación corresponde al Impuesto de Sucesiones y Donaciones. ¿Cuándo se da esta situación? Pues cuando la aseguradora abona al beneficiario el capital asegurado de una póliza, en el caso de que se active la cobertura por fallecimiento del tomador de la póliza.
Por ejemplo, si fallece el tomador del seguro y el cónyuge es el beneficiario de la póliza, el capital asegurado que reciba deberá tributar por Sucesiones.
El Impuesto de Sucesiones y Donaciones depende de tres variables:
El capital asegurado
Dependiendo del dinero que reciban los beneficiarios se pagarán más o menos impuestos. El tipo es mayor, a medida que aumenta el capital asegurado. Los tipos impositivos del impuesto de sucesiones van del 7,65% al 34%.
La comunidad autónoma donde vivía el fallecido
Los Gobiernos Autonómicos tienen margen fiscal para aplicar bonificaciones en el impuesto de sucesiones que pueden llegar al 100% para familiares más cercanos.
Grado de parentesco con el difunto
Los familiares más cercanos gozan de varias reducciones en esta tasa. Por ejemplo, en España los padres, hijos y cónyuges del fallecido con seguro de vida que resultan beneficiarios de la póliza no pagan impuestos por los primeros 9.195,49 euros que reciban.
Impuesto del IRPF en el seguro de vida
Cuando el tomador del seguro sí es la misma persona que el beneficiario, la tributación corresponde al IRPF. Esta situación ocurre cuando una persona tiene seguro de vida e invalidez y tiene que cobrar la indemnización por invalidez tras un siniestro.
En caso de necesitar cobrar el seguro de invalidez, ese dinero pasará a formar parte del IRPF como rendimientos del capital mobiliario. Si el capital asegurado se cobra en un único pago, tributará entre el 19% y el 23 % en impuestos.
- Hasta 6.000 euros, tributará un 19% del IRPF
- Hasta 50.000 euros, un 21% del IRPF
- Más de 50.000 euros, un 23% del IRPF
¿Se puede tener que pagar IRPF y Sucesiones para cobrar el seguro?
Puede darse el caso de que haya que tributar por Sucesiones y por el IRPF al cobrar el seguro de vida. Si el asegurado fallece y es uno de los cónyuges de un matrimonio en gananciales, es posible que al contratar el seguro de vida se especifique que las primas se pagan con la sociedad de gananciales de los cónyuges. Es decir, que ambos han contribuido por igual a pagarlo.
En este caso especial, la mitad de la prestación se liquida por IRPF y la otra mitad por Sucesiones.
Pero para que esto ocurra, debe quedar reflejado en la póliza que las primas se pagan con la sociedad de gananciales. Si no se concreta en la póliza que se ha compartido el pago de las cuotas, se considera que el tomador o tomadora se hizo cargo del seguro de vida y, por tanto, el cónyuge que sobrevive tiene que afrontar el impuesto de sucesiones y donaciones por todo el dinero.
¿Qué pasa con el seguro de vida de la empresa?
Cuando el seguro de vida lo paga la empresa en vez del asegurado, se considera que al trabajador le están dando este beneficio como salario en especie. En la Declaración de la Renta esto se consigna como rendimiento del trabajo.
Para cobrar el seguro de vida, en caso de que el asegurado falleciese, los beneficiarios tendrían que pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, y la cantidad dependerá de la comunidad autónoma, la cuantía y el grado de parentesco.